La diarrea es un trastorno intestinal
frecuente, que se define por la presencia de heces líquidas o más blandas de lo
habitual, y aumento en el número de deposiciones.
Hablamos de diarrea aguda cuando
su duración es inferior a 3 semanas.
TIPOS DE DIARREA:
Existen varios tipos de diarrea
aguda dependiendo de su causa:
Diarrea infecciosa. Causada por
virus, bacterias o parásitos. La vía de transmisión es fecal-oral, por
ingestión de agua o alimentos contaminados. Supone la mayoría de diarreas
agudas.
- Diarrea por
toxiinfección alimentaria. Por toxinas producidas por gérmenes que contaminan los alimentos, y que
alteran el normal funcionamiento intestinal. Dentro de este grupo está la
denominada diarrea del viajero.
- Fármacos. Especialmente antibióticos.
También por laxantes, quimioterápicos, etc.…
- Otras: alimentos
irritantes, alergia o intolerancia alimentaria, enfermedades inflamatorias
agudas intestinales, etc.
Sólo en el caso de diarrea
producida por microorganismos y toxinas existe riesgo de contagio. Para
evitarlo únicamente se deben tomar medidas básicas de higiene que impidan el
contacto de las heces de la persona afectada con alimentos.
SINTOMAS DE LA DIARREA AGUDA
Las personas que sufren una diarrea aguda presentan
además de un aumento en el número de deposiciones, dolor abdominal tipo
retortijón que suele mejorar tras defecar, náuseas, vómitos, y malestar general.
En determinadas ocasiones, también fiebre. y mezclada con las heces podemos ver
sangre, moco y pus.
En la mayoría de los casos el
cuadro se autolimita en 2-5 días.
Generalmente se trata de un proceso de poca severidad,
que no requiere ningún diagnóstico ni tratamiento específico.
Es necesaria la valoración por su médico cuando existe alguno de estos
datos:
- - El cuadro persiste con la misma intensidad más de 3-4 días.
- -La intensidad de los vómitos es tal que impide una adecuada reposición de
líquidos perdidos con las heces.
- -Fiebre elevada.
- -Signos de deshidratación: sed intensa, disminución de la presión sanguínea,
desmayos o mareos al incorporarse, disminución en el volumen de orina…
- -Dolor abdominal intenso.
-Sangre en las heces.
- -En pacientes inmunodeprimidos (con una disminución en las defensas).
La historia contada por el
paciente, así como la frecuencia, volumen y aspecto de las deposiciones, junto
a la exploración física, permiten al médico conocer datos acerca de la causa de
la diarrea y la gravedad del episodio.
En el caso de toxiinfecciones
alimentarias es importante conocer si alguien más de la familia o círculo
social del paciente padece los mismos síntomas a fin de averiguar si existe
algún alimento responsable del cuadro.
En alguno de los casos
potencialmente más graves (aquellos en los que se daba alguno de los datos
expuestos previamente como fiebre elevada, sangre en las heces…) será preciso
realizar determinadas exploraciones diagnósticas (análisis de sangre, examen de
heces, radiografías, colonoscopia…), siendo a veces necesaria la
hospitalización del paciente para rehidratación y tratamiento antibiótico por
vía intravenosa.
TRATAMIENTO
Como ya hemos mencionado, la
mayoría de los episodios de diarrea aguda son leves y autolimitados.
De
especial importancia es que la persona mantenga una ingesta de líquidos
suficiente que evite la deshidratación, así como la reposición de sales que se
pierden con las heces. Existen diversos preparados farmacéuticos con este fin,
así como algunas bebidas tomadas por deportistas.
Mientras el paciente tenga
vómitos no debe tomar alimentos sólidos. Cuando la sintomatología lo permita se
debe iniciar una dieta blanda, con alimentos fáciles de digerir (arroz, huevo
cocido, pan, determinadas frutas como el plátano, jamón cocido…), y se irán
reintroduciendo progresivamente alimentos cotidianos conforme vaya cediendo el
episodio.
En algunos casos se produce una
intolerancia transitoria al azúcar de la leche secundaria al episodio
diarreico, por lo que es recomendable suprimir durante unos días la ingesta de
lácteos.
Cuando la diarrea es
incapacitante, y no existen los datos de gravedad mencionados previamente, se
pueden usar fármacos antidiarreicos, que disminuyen la frecuencia de las
deposiciones y aumentan la consistencia de las heces.
*Es recomendable que esto se haga siempre bajo prescripción médica.
El uso de alimentos probióticos, no
ha demostrado científicamente beneficio en el tratamiento de este cuadro.
Únicamente en determinadas
ocasiones, que deben ser valoradas por su médico, será necesario el uso de
antibióticos en la diarrea aguda.
MEDIDAS BÁSICAS DE PREVENCIÓN
Saneamiento de las redes de
abastecimiento de agua (países en vías de desarrollo)
No beber agua cuando se desconoce
su procedencia y potabilidad.
No bañarse en aguas contaminadas.
Lavarse las manos tras ir al wc y
antes de manipular alimentos.
Lavar y cocinar los alimentos con
agua potable.
Preparación higiénica y
conservación en frio de los alimentos.
PUNTOS CLAVE EN LA
DIARREA AGUDA
1-La diarrea aguda es un proceso infeccioso en la mayoría de los casos,
siendo su vía de transmisión principal el agua y los alimentos contaminados,
por lo que para evitar el contagio deben seguirse las medidas de higiene básicas.
2-En la mayoría de los casos es un proceso leve, que cede en 3-5 días.
3-Durante las primeras 24 horas debe suprimirse la ingesta de alimentos
sólidos, ingiriendo únicamente líquidos para evitar la deshidratación y que
repongan las sales que se pierden (preparados farmacéuticos, bebidas
isotónicas).
4-A partir de las primeras 24
horas, y conforme vayan cediendo los vómitos puede empezar a ingerir alimentos
fáciles de digerir, hasta llegar a su alimentación habitual.
5- Debe acudir a su médico si usted observa signos de alarma como fiebre
elevada, sangre en las heces, dolor abdominal muy intenso, signos de
deshidratación, o cuando el cuadro no cede tras 4-5 días.
Colaboración Especial de: Dra. Ana Bejarano García.